Receta Original de la Pizza de Bresaola y Rúcula

Modo de Preparación: Paso a Paso

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• Extender la masa de pizza al tamaño que queramos trabajar.
• Poner un chorrito de aceite y extenderlo con una cuchara, añadir medio trozo de mozzarella.
• Introduce la pizza en el horno y hornéala a 240° durante unos 40 minutos.
• Mientras la base está en el horno, prepara los ingredientes prestando especial atención en cortar la bresaola en finas lonchas,cortar la rúcula y sacar los 30 gramos de queso grana en lascas también finas.
• Sacar la pizza del horno y cubrirla con las lonchas de bresaola, la rúcula y el queso parmesano. Añadir un chorrito de aceite.
• No añadas especias que interfieran con el sabor de los ingredientes. Sírvela caliente para que el calor de la base alcance a la bresaola y al grana.

Otra variante: la pizza de salmón ahumado con rúcula

Disponemos de otra variante de esta receta también con rúcula y con un carácter también propio. El salado y el ahumado del salmón es también un magnífico compañero para esta verdura. Prueba ambas recetas y decide cuál es la más apropiada para tu paladar.

Pizza de Salmón Ahumado y Rúcula

Cómo hacer auténtica Pizza de Bresaola y Rúcula Casera

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La bresaola es un embutido crudo, entero y sin ahumar, típico de las regiones del norte de Italia. Puede elaborarse con carne de vacuno, caballo, venado o cerdo. La Bresaola della Valtellina es un producto IGP (Indicación Geográfica Protegida).

El bresaola es uno de los embutidos con menos grasa y más digeribles. Desde el punto de vista nutricional, es una fuente de proteínas de alta calidad y de vitaminas y minerales aliados del buen funcionamiento del metabolismo (en particular, vitaminas del grupo B, zinc y fósforo) y con poder antioxidante (especialmente vitamina E y selenio). Además, su fósforo favorece la salud de huesos y dientes, el hierro y el cobre son importantes para la producción de glóbulos rojos y el potasio contribuye a una buena salud cardiovascular. La bresaola, sin embargo, es rica en sal y colesterol, ambos enemigos de la salud del corazón; según los expertos, su ingesta debe limitarse a 2 gramos y 300 mg al día, respectivamente.

Si no dispones o encuentras este ingrediente estrella, no temas en sustituirlo por jamón serrano o caña de lomo para probar una pizza diferente. Del mismo modo, si no dispones de queso grana sustitúyelo por completo por mozzarella o parmesano (en menor cantidad).